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A la Contra

by Muy Deficiente

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1.
Esa niña de ojos verdes me ha robado el corazón. Viene y va parece un duende que del bosque se escapó. Una ola en medio de un ciclón, un tornado girando alrededor. Pero tú sabes que soy yo el que te mira al caminar y nunca olvides que un adiós jamás se dice hasta el final. Y la amistad no es una flor que se marchita con la edad, nuestra amistad es un avión que nunca para de volar. Ahhh… Que nunca para de volar. Besos perdidos al dormir, mensajes al amanecer. Con las canciones discutí, cuál resumía el anteayer. Y descubrí que eso no es lo importante, poder dormir sin querer despertarte. Tiempos de ayer, caricias apagadas, litros de alcohol corriendo por la almohada… Pero tú sabes que soy yo el que te mira al caminar y nunca olvides que un adiós jamás se dice hasta el final. Y la amistad no es una flor que se marchita con la edad, nuestra amistad es un avión que nunca para de volar. Ahhh… Que nunca para de volar.
2.
Cuántas noches soñé que me refugiaba en tu casa y me perdía en tu dulce piel. Cuántas veces grité y al cielo aclamé que tus ojos volvieran algún amanecer. Pero hoy ya no sé que pensar, me pierdo en tantos bares, tu sonrisa ya no está. Confusión, me cambio de portal, encuentro compañía un rato nada más. Y no aguanto que pase sin ti el tiempo, que mire el reloj un momento y en mi nube no aparezcas tú. Ya entiendo por qué te cambiaste de barco, el mío había naufragado, me tomo una a tu salud. Ya puedes sonreír y puedes ser feliz, celebrar cumpleaños y día de San Valentín. Cuándo piensas volar y ese cuento abandonar que tú misma inventaste por no mirar atrás. Pero hoy ya no sé que pensar, me pierdo en tantos bares tu sonrisa ya no está. Confusión, me cambio de portal, encuentro compañía de esa que acaba mal. Y no aguanto que pase sin ti el tiempo, que mire el reloj un momento y en mi nube no aparezcas tú. Ya entiendo por qué te cambiaste de barco, el mío había naufragado, me tomo una a tu salud. Oohhhh… Y no aguanto que pase sin ti el tiempo, que mire el reloj un momento y en mi nube no aparezcas tú. Ya entiendo por qué te cambiaste de barco, el mío había naufragado, me tomo una a tu salud.
3.
Esta lluvia no me deja ver, no consigo mantenerme en pie, dejo huella en todos los cristales y otra ronda a deber. Cuéntame si ahora eres feliz, si acertaste en San Valentín. Me tienes muy desinformado denuncia mi cicatriz. Los lunes se quedaron cortos. El viento te alejó muy pronto. Ya casi me he olvidao de ti, pero no consigo ser feliz. Y por mucho que me dé de golpes contra la pared tú ya no vas a aparecer. No hay motivos pa’ esquivar el sol, ya no te puedo convencer de poder ver amanecer. Ya casi me he olvidao de ti y mi burbuja espera un frenesí. Londres se quedó pequeño y en tu vida cometí un error, suerte que un día alguna estrella iluminó tu corazón. Tantas historias por vivir se guardaron en un cajón, como el humo del tabaco que algún día nos unió. Las nubes no te conquistaron. Los buitres te dieron la mano. Ya casi me he olvidao de ti, parece que ya vuelvo a sonreír. Y por mucho que me dé de golpes contra la pared tú ya no vas a aparecer. No hay motivos pa’ esquivar el sol, ya no te puedo convencer de poder ver amanecer. Ya casi me he olvidao de ti, parece que ya vuelvo a sonreír. Y por mucho que me dé de golpes contra la pared tú ya no vas a aparecer. No hay motivos pa’ esquivar el sol, ya no te puedo convencer de poder ver amanecer. Y por mucho que me dé de golpes contra la pared. No hay motivos pa’ esquivar el sol, ya no te puedo convencer. Ya casi me he olvidao de ti…
4.
Derritiendo esa caricia como un témpano de hielo, dibujando esa sonrisa como el sol dibuja el cielo. Recordando esa mirada sólo a un palmo de distancia, como el día a la mañana, como un perfume de almohada. Imagino que estás cerca, de noche tras la ventana. A las seis la cenicienta, un noviembre en la estacada. Pero yo seguiré enfrascado en mi ayer. No hay dolor, no hay rencor, no hay patadas, no hay amor. Sólo tú, corazón, me embriagaste con tu olor. Algún día, quizás hoy, vendería la razón. Sin las prisas del momento por querer pertenecer a la vida de una Diosa, al mirar de una mujer. Una historia interminable, un cuento sin solución, tras un mes siendo salvaje , vuela la imaginación. Pero yo seguiré enfrascado en mi ayer. No hay dolor, no hay rencor, no hay patadas, no hay amor. Sólo tú, corazón, me embriagaste con tu olor. Algún día, quizás hoy, vendería la razón. Algún día, quizás hoy, vendería mi razón.
5.
Me sorprenden las mañanas viendo el mar entre tus faldas. Poco a poco amanece mientras tú desapareces. Es la hora, mira al frente, otra ola viene fuerte. Los recuerdos ya se ocultan por debajo de la espuma. Siempre en pie después de la corriente, gota a gota, frente a frente. Ésta será nuestra última vez. Sube alto para poder verte, grita fuerte para no perderte. Sólo quiero verte una vez más. Naufragando en la cama, esquivando las palabras. Caracolas que nos silban, el futuro nos despista. De repente nada importa, la corriente ya no azota. El destino siempre llega, tú la luna en mi marea. Siempre en pie después de la corriente, gota a gota, frente a frente. Ésta será nuestra última vez. Sube alto para poder verte, grita fuerte para no perderte. Sólo quiero verte una vez más.
6.
Tumbado en la habitación esperando inspiración, recordando los momentos, transformándolos en voz. Versionando esa canción, reviviendo lo mejor de unos días que entre letras me pasé junto al sillón, con dolores de cabeza cuando siente el corazón. Pensativo en el salón con acordes de guitarras dando vuelta en mi interior. Sólo un vuelo entre los dos, con el móvil enganchados hasta que se pone el sol. Los recuerdos de un ayer, el futuro está por ver, tu mirada cristalina no me deja responder. Sólo espero que esta vez la partida acabe bien, con las cartas en la mesa apostando hasta mi piel. Pensativo en el salón con acordes de guitarras dando vuelta en mi interior. Sólo un vuelo entre los dos, con el móvil enganchados hasta que se pone el sol…

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released April 5, 2013

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Muy Deficiente Santander, Spain

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